jueves, 6 de mayo de 2010

Este señor tan laborioso es Roger Fry en los Talleres Omega, poco antes de la guerra del catorce. El vestuario de las señoras y sus peinados flou nos indican que estamos en Bloomsbury. En estos talleres que fundó Fry se diseñaban los interiores tan característicos del grupo, diseños que nunca sabré si me encantan o me repatean, como en general me ocurre con todo el microcosmos bloomsburiano, tan refinado y moderno como endogámico.
Roger Fry quería convertirse en un gran artista pero no pasó de pintor mediocre al tiempo que, casi sin querer, se convertía en el teórico y crítico de Arte más influyente de Inglaterra. Era muy listo.
A él debemos el término postimpresionista que acuñó cuando organizaba en 1910 una exposición de los rupturistas pintores franceses para las Grafton Galleries de Londres, dos años después montaría otra muestra del grupo.
Fry aprendió de niño que "todas las pasiones, aunque sea por las amapolas rojas, nos exponen al ridículo" pero no por ello dejó de ser apasionado. Se enamoró de Cezanne y supo entender y hacernos entender la importancia de su obra, su lugar en el escalafón de genios. No se limitó a relacionarle con sus contemporáneos o sus inmediatos predecesores sino que le adjudicó el lugar que le correspondía en la historia del arte, en diálogo con los maestros clásicos.
En nuestro Ahora del arte,tan ajeno a la crítica formalista, sería interesante, casi necesario, revivir la mirada de Fry, la agudeza de su pensamiento y su inteligencia retiniana.
Podría seguir regodeándome en mi admiración a Fry y sus Cezannismos pero no quiero pasarme de lista, mis conocimientos del crítico son limitados, la que sabe de esto es Paula Lizarraga que publicó en EUNSA: "El arte, un asunto entre seres humanos, Estudio de la crítica de arte de Roger Fry" , y la edición que yo manejo del "Cezanne, un estudio de su evolución" de Fry. Es también recomendable leer - y a esto, por ejemplo, me refiero cuando hablo de endogamia - la biografía de Fry por Virginia Wolf, editada por su Hogarth Press en 1940.